Los departamentos de TI se enfrentan a una carga de trabajo creciente y a tareas cada vez más complejas, pero sin un aumento proporcional en los recursos disponibles. Esta es una realidad común en la mayoría de las organizaciones. Por ello, en este artículo compartimos 10 ideas clave para empezar a automatizar y optimizar las operaciones del área tecnológica.
Por Miguel Ángel Segura,
Business Manager
IT Governance
Todas las organizaciones se enfrentan al desafío de aumentar su eficiencia para mantenerse competitivas. Este objetivo es el núcleo de muchas prácticas asociadas al IT Governance, como DevOps o SRE. Y en el centro de todas ellas hay un elemento común: la automatización, que actúa como catalizador para agilizar, escalar y transformar las operaciones del departamento de TI.
Y es que los beneficios de la automatización de TI (IT Automation) están muy claros:
- Permite la realización de muchas más tareas con los mismos recursos.
- Optimiza el tiempo del equipo, pudiendo dedicar más tiempo a las tareas de valor añadido.
- Reduce el tiempo de respuesta ante cualquier petición.
- Garantiza que las tareas se ejecutan siempre de la misma forma.
- Reduce el número de errores humanos.
- Mantiene el conocimiento dentro de la organización.
Por suerte, en el mercado abundan diferentes plataformas que nos permiten aplicar con garantías la Automatización de IT: Ansible o Terraform en el ámbito de la automatización de operaciones; Jenkins para el despliegue y CI/CD; Operations Orchestration para la automatización de procesos (ITPA); soluciones específicas como Dynatrace vinculadas a la seguridad y observabilidad; o herramientas como UIPath que permiten automatizar tareas administrativas a través de RPA (Robot Process Automation).
Partiendo de la base de que cualquier tarea repetitiva es susceptible de ser automatizada, conviene analizar cada caso para priorizar aquellas tareas que aporten un mayor beneficio: Es preferible automatizar una tarea de 5 minutos que se realiza cada día, antes que otra a la que dedicamos 8 horas, pero que sólo se ejecutará dos veces al año.
Dicho esto, tras más de 10 años implementando plataformas de IT Automation en nuestros clientes, podemos identificar una serie de casos de uso que casi siempre se repiten. Por eso, creemos que pueden servir como ideas para aquellas organizaciones que quieran empezar a automatizar y no saben realmente por dónde empezar:
1: Parcheados / upgrades de sistemas operativos
Dependiendo del tamaño de la infraestructura, aplicar periódicamente los parches y subidas de versión de sistema operativo puede suponer una cantidad de trabajo enorme para los administradores de sistemas. Por ello, contar con un mecanismo que permita ejecutar de forma masiva estos cambios (obviamente habiéndolo testeado previamente en un entorno controlado), permite un ahorro de tiempo tan grande que se trata de una de las primeras tareas a automatizar.
2: Peticiones de usuarios
Vuelta al trabajo después de las vacaciones: ¿A cuántos usuarios se les ha caducado la contraseña o sencillamente no la recuerdan? Este es simplemente un ejemplo de aquellas peticiones de usuario que son fácilmente automatizables y que al cabo del año se repiten más veces. Y si este caso concreto no es significativo, seguro que hay otras peticiones que se repiten hasta la saciedad: Altas/bajas de usuarios en los sistemas, ampliación del tamaño del buzón de correo, añadir usuarios a listas de distribución, conceder permisos de acceso a un servicio, etc.
3: Despliegue y configuración de agentes
Muchos sistemas requieren de la instalación de un agente para poder realizar su trabajo: Sistemas de seguridad, inventario automático, monitorización, gestión de logs, backup, etc. Y esto, inevitablemente requiere llevar a cabo tareas de despliegue y configuración en toda la infraestructura. Así, los proyectos de actualización, implementación o sustitución de este tipo de plataformas se ven penalizados por la cantidad de trabajo que requiere conectarse con cada elemento para instalar el agente y configurarlo. Pero a través de las plataformas de automatización esta tarea se puede ejecutar de forma masiva.
4: Aplicación de soluciones temporales
Hablamos de los famosos “workarounds” ante incidencias recurrentes. Con el objetivo de evitar el impacto de ciertas incidencias conocidas, los equipos ya tienen una serie de procedimientos a ejecutar cuando éstas aparecen: borrar el espacio en disco cuando se está llenando, redirigir el tráfico si cae una línea de comunicación, reiniciar un servicio, etc. Pues mediante la integración de la plataforma de automatización con la monitorización que detecta estas incidencias es posible ejecutar automáticamente estas acciones de forma automática.
5: Securización de entornos
Cada vez más organizaciones definen guías de configuración para incrementar el nivel de seguridad de sus entornos. Acciones como cerrar puertos, aplicar políticas de contraseñas o deshabilitar servicios innecesarios pueden incrementar considerablemente el nivel de seguridad de los sistemas. Pero nuevamente nos encontramos con el problema de dedicar el tiempo necesario para aplicarlo en todos los sistemas y de ser capaces de comprobar periódicamente que estas guías se siguen aplicando. A través de la plataforma de automatización es posible crear flujos que configuren adecuadamente los sistemas y programar revisiones periódicas para validar su cumplimiento.
6: Validaciones Ready for Business
Llegar a primera hora de la mañana y encontrarnos encima de la mesa un informe detallado sobre cómo están nuestros servicios críticos, si las copias de seguridad se han ejecutado correctamente, si ha habido algún error en las ETLs que cargan datos de madrugada… Pues esto, implica tener a alguien dedicando un buen rato cada día. ¿Y si lo automatizamos? Supongamos que alguien dedica todos los días unos 20 minutos en hacer esta revisión y enviar un correo informando. Si la hacemos cada día, al cabo del año son más de 120 horas que podrían dedicarse a otras tareas.
7: Paradas controladas de los servicios
Los sistemas cada vez son más complejos y cuando es necesario realizar una parada controlada (por ejemplo, para aplicar un cambio o actualización), se tienen que realizar diferentes pasos en un orden muy concreto para no provocar problemas con la integridad de los datos. Y lo mismo a la hora de reiniciar el sistema. En este caso, más que por ahorrar tiempo, que también, los clientes automatizan para garantizar que todo se ejecuta siguiendo exactamente los procedimientos definidos y validados.
8: Instalaciones de paquetes de software
Con la misma filosofía que cuando hablábamos de la aplicación de parches o actualizaciones, es común que las organizaciones tengan que desplegar software de forma recurrente, o sobre un volumen elevado de dispositivos. Si bien es cierto que muchas organizaciones ya disponen de herramientas específicas para realizar esta tarea, las plataformas de automatización también son perfectamente capaces de llevarlas a cabo.
9: Limpieza del directorio activo
Esta es la típica tarea que suele quedarse en la cola de temas pendientes porque no se considera urgente y nos falta tiempo. Pero se trata de una tarea sencilla de automatizar: Mediante la realización de un proceso de automatización adecuado es posible programar, con la periodicidad que se considere, la revisión y eliminación de objetos obsoletos en el Active Directory, como cuentas de usuario inactivas, equipos dados de baja o grupos sin uso.
10: Supervisión de ETLs
Muchas organizaciones tienen procesos de carga de datos que son críticos para el negocio y que deben ejecutarse a una hora muy concreta. ¿Pero qué pasa si fallan? Pues desgraciadamente es común enterarnos al día siguiente cuando el daño ya está hecho. A través de flujos de automatización es posible validar que en un momento determinado se ha efectuado correctamente la transferencia de datos mediante una lógica predefinida. Por ejemplo: verificamos que se han cargado correctamente los datos, si no es así, validamos que no hay problemas de comunicación o de permisos (si los hubiera, aplicamos un workaround o notificamos al equipo correspondiente), volvemos a lanzar la ETL y validamos que el resultado ahora es correcto, enviando finalmente un correo para dejar constancia del problema y de los pasos realizados.
Como decíamos al principio del artículo, los casos de uso para la automatización son prácticamente infinitos y dependen en gran medida del contexto y las necesidades de cada organización. Sin embargo, este listado ofrece una referencia concreta basada en prácticas reales que ya están siendo automatizadas en muchas empresas. Puede servir como punto de partida para identificar oportunidades similares en tu entorno y comenzar a estructurar una estrategia de automatización TI que aporte valor desde tareas concretas y tangibles.
En ABAST, llevamos muchos años acompañando a nuestros clientes en sus procesos de automatización, utilizando soluciones como Ansible, Operations Orchestration, Jenkins o Dynatrace para optimizar tareas, mejorar la eficiencia operativa y reducir errores. Si estás valorando iniciar o ampliar tus iniciativas de automatización, estaremos encantados de conversar contigo y definir juntos la estrategia de colaboración que mejor se adapte a tus objetivos y necesidades. Puedes contactarnos a través de nuestro formulario web.