Una preocupación se extiende en el sector tecnológico global, una tensión sin precedentes que amenaza con redefinir las cadenas de suministro, inflar los costes y poner en jaque los proyectos de modernización de infraestructuras TI en todo el mundo. El origen de esta convulsión no es otro que el apetito voraz de la Inteligencia Artificial (IA). La demanda masiva de componentes para construir y alimentar los centros de datos, las plataformas en la nube y los sistemas de IA está provocando una escasez crítica de memorias de alto rendimiento, unidades de estado sólido (SSD) y chipsets de comunicaciones, un problema que ya repercute directamente en las organizaciones españolas. En este artículo repasamos los orígenes de esta situación, la visión de líderes tecnológicos y analistas sobre cómo va a afectar en el 2026 esta situación al mercado TIC y a la planificación de inversiones TI de las empresas españolas, y cómo desde Abast podemos ayudar a nuestros clientes a reducir ese impacto y facilitar la ejecución de nuevos proyectos.