Cassandra Garcia, Departamento de Marketing
Visibilizando el talento LGTBI+ en el sector TIC
En el mundo de la tecnología, donde la innovación y la creatividad son el motor de cambio, la diversidad se revela como un valor esencial. El talento no entiende de etiquetas, y sin embargo, durante décadas, muchas personas LGTBI+ han contribuido de forma decisiva al avance del sector tecnológico sin el reconocimiento que merecían.
Desde Abast, queremos sumarnos a la visibilización del colectivo LGTBI+ en el ámbito tecnológico, reflexionando sobre su papel a lo largo de la historia y reafirmando nuestro compromiso con un entorno profesional inclusivo, respetuoso y libre de discriminación.
Figuras clave del colectivo LGTBI+ en la historia de la tecnología
Hablar del origen de la informática moderna es hablar de Alan Turing, matemático británico cuya genialidad permitió descifrar los códigos nazis durante la Segunda Guerra Mundial y sentó las bases de la inteligencia artificial. A pesar de su enorme contribución, Turing fue perseguido por su orientación sexual en una época en la que ser homosexual era considerado un delito.
En el presente, Tim Cook, CEO de Apple desde 2011, es una de las figuras más influyentes del sector tecnológico y un referente global tanto por su liderazgo empresarial como por su visibilidad como hombre gay. En 2014, se convirtió en el primer CEO de una empresa del Fortune 500 en declararse públicamente homosexual, un gesto que inspiró a muchas personas dentro y fuera del sector a vivir con mayor libertad y autenticidad.
Como ellos, muchas otras personas LGTBI+ han marcado hitos en la ciencia y la tecnología. Entre ellas se encuentran:
- Lynn Conway, pionera en la arquitectura de computadores y defensora de los derechos de las personas trans, cuya innovación en microprocesadores es base de muchos de los sistemas actuales.
- Audrey Tang, ministra digital de Taiwán y mujer trans, reconocida mundialmente por su liderazgo en gobierno abierto, software libre y participación ciudadana digital.
- Jon “maddog” Hall, defensor de los sistemas de código abierto y figura destacada del movimiento Linux, quien ha compartido públicamente su identidad como hombre gay en la industria tecnológica.
Estas personas no solo abrieron camino en el desarrollo de nuevas tecnologías, sino también en la visibilidad y reconocimiento de la diversidad dentro del sector.
La diversidad como motor de innovación
La inclusión de diferentes perspectivas enriquece cualquier organización. Está demostrado que los equipos diversos toman mejores decisiones, identifican oportunidades más rápidamente y generan soluciones más creativas y efectivas.
Sin embargo, aún persisten retos. Según diversos estudios, muchas personas LGTBI+ no se sienten seguras de compartirlo abiertamente en el entorno laboral, por temor a discriminación o falta de aceptación. Este es un problema que debemos seguir combatiendo con políticas inclusivas, sensibilización y compromiso real por parte de las organizaciones.
Nuestro compromiso en Abast
En Abast, creemos firmemente en el poder de la diversidad para transformar la tecnología y la sociedad. Por eso, asumimos como propios los principios de no discriminación e igualdad de trato, tal y como establece la legislación vigente, e implementamos medidas activas para garantizar un entorno de trabajo donde todas las personas, independientemente de su orientación sexual o identidad de género, puedan desarrollarse profesionalmente con plenitud y sentirse seguras para mostrarse tal y como son.
Nos enorgullece contar con nuestro Plan LGTBI+, una iniciativa que recoge acciones concretas para fomentar la inclusión, asegurar el respeto y prevenir cualquier forma de discriminación o acoso. Además, contamos con un Protocolo de Prevención y Actuación contra el Acoso, herramienta clave para detectar y actuar con firmeza ante situaciones que atenten contra la dignidad o los derechos de las personas.
Hacia un futuro más inclusivo
En Abast, sabemos que el progreso no solo se mide en avances tecnológicos, sino también en cómo tratamos a las personas que los hacen posibles. Por eso, seguiremos trabajando para construir una empresa más justa, más igualitaria y humana.
Definitivamente, la innovación necesita de todas las voces, el talento no tiene etiquetas y la diversidad es, sin duda, nuestro mayor valor.